Muchas personas hoy en día dicen tener una vida llena de estrés y preocupaciones y buscan “recetas” para tener paz en su entorno.
No importa lo que hagas, siempre el estrés tiene un espacio en nuestras vidas, como condición natural de adaptarse a la presión social. Sin embargo, podemos hacer un esfuerzo de simplificar nuestra vida tomando acciones pequeñas que a corto plazo traen resultados satisfactorios.
A continuación te platico un poco de lo que a mí me ha servido para tener una vida más feliz, algunas cosas son muy simples pero a la vez muy efectivas:
- Salir más temprano: tenía la mala costumbre de siempre salir con el tiempo medido, exponiéndome a tener un accidente por ir de prisa
- Eliminar suscripciones innecesarias: estaba inscrito como a 10 revistas on-line que cada día llenaban mi e-mail de 15 o 20 mensajes nuevos. Yo dejaba todo en orden y al otro día las cosas estaban peor. Muchos anuncios innecesarios y promociones ridículas. Elimina esas suscripciones y simplifica tu cyber-espacio.
- Ignora el “qué dirán”: para todo lo que iba a hacer, siempre calculaba lo que podían pensar los demás. A veces no me ponía cierta ropa, aún queriendo, simplemente porque “me preocupaba” lo que el otro pensara.
En fin, pensaba mucho en las opiniones de terceros y toda esta incertidumbre me angustiaba. Ahora yo leo, escucho y me pongo lo que me gusta y así vivo más tranquilo.
- Toma un día para ti: cada cierto tiempo, tómate un día para ti, para hacer NADA! sólo respirar profundo, dar gracias a Dios y descansar en un lugar que te desconecte de todo lo que pueda causarte estrés, incluso si eso es muy importante.
- Come lo más saludable que puedas: aunque esto no es instantáneo los beneficios a tu salud son obvios y mientras tienes mejor salud, mejor será tu capacidad de evitar el estrés.
- Establece un horario para las obligaciones: todo aquello que estás obligado a hacer, es mejor si tiene un espacio específico en tu día. De todos modos son obligaciones, o sea que tienes que cumplirlas.
- Si dejas que todo tome el curso sin tu control, verás que el tiempo no se distribuye de forma justa. Al final, tendrás todo encima…literalmente.
- Hacer un presupuesto: hay muchos que nunca saben para dónde se les va el dinero. No importa si ganan cientos o miles, simplemente no saben controlarse.
- Confiar tu vida a Dios: Las personas no nos preocupamos mucho de nuestra vida espiritual y creemos que no tiene mucha influencia en nosotros. No logramos comprender que es lo más importante.
- ¿Cuántas veces al día haces oración? ¿Cuántas veces al día respiras profundo por varios minutos y dices “gracias Señor”? ¿Cuántas veces al día cierras los ojos voluntariamente e intentas limpiar tu mente y procuras perdonar?
- ¿Cuántas veces al día simplemente sonríes sin ninguna razón aparente? Yo hago esto a diario…y los resultados han sido tan buenos que muchos me preguntan cómo me mantengo siempre con tanta calma.
- Procura hacerte de buenos amigos: Las personas buenas a tu alrededor te sabrán dar buenos consejos en momentos apropiados; te darán ejemplo de vida, enseñándote que hacer lo correcto siempre es la mejor opción. Te acompañarán en las buenas, pero sobre todo en las malas, con un amor incondicional y real.
En fin, estas cosas me han dado buenos resultados y te pueden funcionar a ti también.
Hasta pronto.