1

Agradece lo que tienes. Muy a menudo pensamos acerca de lo que no tenemos, o de cómo hemos sido lastimados, o de lo que ha salido mal. Tendemos a enfocarnos en lo negativo, y solemos dejar de lado las cosas buenas de la vida. De hecho, casi siempre podemos encontrar más cosas por las cuales estar agradecidos.

2

Cree que tienes lo necesario para ser exitoso. No te des por vencido cuando hace algo estúpido o cuando te encuentras con un obstáculo que se interpone en tus planes. Recuerda que, a pesar de las dificultades, tú mantienes el control de tus acciones.

3

Escribe en un pedazo de papel tus pensamientos negativos, luego rompe la lista y de ser posible quémala. Ahora, escribe una larga lista de afirmaciones personales y trata de leerla varias veces al día. De esta manera le abrirás paso en tu mente a las cosas positivas, mientras desechas lo negativo.

4

Reconoce y evita a todas las personas negativas que tratan de desanimarte o de apartarte de tu camino. La mayoría de las ocasiones este tipo de personas no van a cambiar, por el contrario, quieren que los demás adopten su misma postura. Por lo tanto, es mejor no pasar demasiado tiempo con ellos.

5

Identifica y busca a las personas positivas que ven a la vida como un regalo para ser atesorado y disfrutado. Estas personas suelen ver lo bueno en los demás, y apoyaran a cualquiera que conozcan a alcanzar su máximo potencial. Además, su actitud positiva seguramente se contagiará a todas las áreas de tu vida.