Desde hace 500 años la montaña Chimborazo, la más alta del Ecuador, ha sido testigo de la tradición de minar hielo. Una empresa peligrosa que hasta hace unos años estaba fuertemente enraizada en las comunidades de los alrededores.

Pero el avance tecnológico cambio las cosas, haciendo que el hielo del Chimborazo sea poco demandado. Y que de las decenas de hieleros que antes subían diariamente a recolectar el preciado bien, solo quede uno. Su nombre es Baltazar Ushca Tenesaca, y se ha ganado el título de ‘El último hielero del Chimborazo’.

¿Quieres conocer su historia? En ese caso, no te puedes perder el siguiente video:

Pasando el legado

Durante 60 años, Baltazar Ushca ha continuado con su trabajo como hielero. Para conservar esa tradición ancestral, se ha adaptado a los tiempos. Ya no va todos los días a minar hielo, lo hace tan solo una vez a la semana. También trabaja como guía turístico en el municipio de Guano, donde su conocimiento de primera mano le ha convertido en un foco de atracción para los turistas. Pero la fama no le preocupa. Él espera poder seguir trabajando hasta el día de su muerte.

Y a pesar del título que le ha vuelto famoso, también está dispuesto a compartir su legado. Recientemente ha conseguido un ‘aprendiz’, su yerno Juan Ushca. A pesar de las dificultades, éste último asegura que conservar el oficio centenario es la mayor satisfacción que puede lograr.

Y mientras tengan la fuerza necesaria, estos dos hombres seguirán haciendo lo que más les satisface: minar el hielo especial de las alturas del Chimborazo.