Nuevos descubrimientos arqueológicos apuntan a revelar la ciudad en la cual nacieron los apóstoles Pedro, Andrés y Felipe.
Recientemente, arqueólogos israelís del Kinneret Institute for Galilean Archeaology dieron a conocer un nuevo descubrimiento que podría apuntar a la ubicación de la ciudad de Betseda, de la cual eran originarios los apóstoles Pedro, Andrés y Felipe, además de ser lugar en el cual se presenciaron milagros realizados por Jesús, recordándose que ahí sanó a un ciego y que en sus cercanías tuvo lugar la multiplicación de los panes y los peces.
Gracias al historiador judío Flavio Josefo del siglo I d.C., se sabe que la ciudad de Betseda, cercana al mar de Galilea, fue reformada en una gran ciudad romana llamada Julias. Por las descripciones, se creía que Betseda podría estar localizada en uno de 3 asentamientos: et-Tell, el-Araj y el-Mesydiah.
Historicamente, se había considerado a et-Tell como la localización más probable, sin embargo, las nuevas excavaciones apuntan a el-Araj como el candidato principal para albergar a Betseda.
Anteriormente se creía que el-Araj se había edificado hasta la época bizantina, pero hace poco se descubrió, debajo de un edificio bizantino, una capa llena de restos de la época romana, incluyendo mosaicos, cerámica, e incluso monedas, incluyendo un denario del emperador Nerón del año 65 o 66.
Siendo estos restos indicadores de una gran urbe urbana, se cree que este es el lugar dónde se encontraba la antigua Betseda. Aún queda mucho por descubrir en estos asentamientos, por lo cual los investigadores anunciaron que continuarán con las excavaciones en el verano del próximo año.
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